noviembre 01, 2010

En una noche como esta... pero hace ya dos años... un verdadero rescate!



Nunca imagine que una noche me haria recuperar la fe -y no precisamente en un Dios- en la gente que esta ahi, siempre...


Hoy, a dos años de distancia se que fue un momento bien pinche cabrón. Que la verdad no valore, núnca lo hice. Pero cuando toque fondo, cuando me derrumbe vi con claridad lo que me habia dejado esa noche.


Incluso, esta es la pinche hora que núnca se lo agradeci. Que no tuve los huevos para decirle Gracias! Jamás lo hice, y hoy menos que núnca lo puedo hacer.


-y también esta es la pinche hora que ni por enterada de que aún le sigo escribiendo-


Bastarón dos horas y media de esa noche para exaltarme muy cabrón, para disfrutar esa nervia bien chida, para gozar ese momento de putisima, increible; pero tuvo que pasar mas de un año para entendarla. Para recordala y entender el como paso, el porque y el para que.


Para levantarme de ese hoyo, recuperar las fuerzas y tener fé en que, a pesar de todo, siempre estuvo ahi.


A dos años ya, te sigo debiendo mucho de lo que soy ahora. Cambie un chingo, un madral; mejore en muchos aspectos y, por encima de todo, aprendí que la humildad siempre te lleva por el lado correcto. Que te deja muchisimas enseñanzas, y que al final siempre veras la luz de un camino lleno de buena gente que da todo sin pedir nada.


Hoy de nuevo te digo gracias. Y si estuvieras frente a mi, esto mismo te lo diria sin tartamudear, sin titubear y como siempre -o estoy seguro- lo hubieras deseado: mirandote de frente.


Y ojalá y algún día... algún día...

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